Social
Perdió su pelota y pegó carteles en su barrio para encontrarla: tuvo un increíble final
El chico de 7 años estaba muy triste por la situación, aunque logró algo inesperado. Perdió su pelota y pegó carteles en su barrio para encontrarla: tuvo un increíble final.
Un chico jugaba con su pelota todos los días. Una vez, en una plaza, la perdió de vista y no la pudo encontrar. Desesperado, pegó carteles conmovedores en los postes de su barrio para que lo ayuden a recuperarla.
«¿Han visto mi pelota?», decía el texto junto a una imagen de su querido juguete. La mamá subió un posteo a Facebook, que se volvió viral a las pocas horas y tuvo un inesperado final.
«Mi hijo Benicio, de 7 años, es el autor de estos cartelitos. Si alguien se la llevo pensando que estaba abandonada, les encargo que la devuelvan (…) Él está muy triste», escribió su mamá Marisa.
El protagonista de la historia vive en la ciudad bonaerense de Tandil. Pronto, los usuarios de la zona se hicieron eco de la noticia y decidieron ayudarlo: aportaron datos de posibles pelotas perdidas. Pero lo más importante llegó después.
Los vecinos, solidarios, junto a una petrolera estatal, le donaron 40 pelotas. Entre ellas, estaba un modelo similar a la que perdió: marca YPF. Benicio ya podía volver a disfrutar del fútbol.
Un chico jugaba con su pelota todos los días. Una vez, en una plaza, la perdió de vista y no la pudo encontrar. Desesperado, pegó carteles conmovedores en los postes de su barrio para que lo ayuden a recuperarla.
«¿Han visto mi pelota?», decía el texto junto a una imagen de su querido juguete. La mamá subió un posteo a Facebook, que se volvió viral a las pocas horas y tuvo un inesperado final.
«Mi hijo Benicio, de 7 años, es el autor de estos cartelitos (…) Si alguien se la llevo pensando que estaba abandonada, les encargo que la devuelvan (…) Él está muy triste», escribió su mamá Marisa.
El protagonista de la historia vive en la ciudad bonaerense de Tandil. Pronto, los usuarios de la zona se hicieron eco de la noticia y decidieron ayudarlo: aportaron datos de posibles pelotas perdidas. Pero lo más importante llegó después.
Los vecinos, solidarios, junto a una petrolera estatal, le donaron 40 pelotas. Entre ellas, estaba un modelo similar a la que perdió: marca YPF. Benicio ya podía volver a disfrutar del fútbol.
«Quiero agradecer a cada uno que se tomo el tiempo de leer esta publicación, quiero agradecer de corazón a cada persona que quiere regalarle su pelota a mi hijo, es genial lo que uno siente recibiendo tantos lindos mensajes», dijo su madre.
Como habían recibido un montón, organizaron una movida solidaria y les entregaron a aquellos chicos que no podían tener una.
En el Día del Niño, muchos nenes fueron felices con sus nuevos regalos. Además, donaron las pelotas a un merendero local que le da de comer a 30 personas. Los amigos de Benicio también recibieron los juguetes.
Sin dudas, una historia que merece ser recordada. Las buenas personas todavía existen y se destacan por sus acciones.
Fuente: Clarín