En menos de 15 días, el Club Guaycurúes Rugby fue víctima de dos hechos delictivos que golpean duramente a la institución y a toda la comunidad que la sostiene con esfuerzo.

Primero, delincuentes sustrajeron una heladera, una motoguadaña y una garrafa de 15 kg. Ahora, este último fin de semana, se produjeron nuevos ingresos con roturas, destrozos y todavía no se ha podido determinar con certeza qué elementos fueron robados. Al parecer como primeros datos extraoficiales, los delincuentes se llevaron cables y otra garrafa.

Desde el club expresaron su profundo malestar y preocupación: «Todo lo que conseguimos fue con sacrificio y esfuerzo, y hoy nos lo destruyen». Así lo manifestaron en sus redes personales.

Por Móvil Quique

Todo comenzó cuando la víctima de 27 años, denunció que al regresar a su casa al mediodía por calle Brasil, notó que una de las ventanas había sido forzada con rotura de vidrio. Del interior le sustrajeron 2 camperas y una tarjeta de Mercado Pago.

Al revisar la aplicación, advirtió que habían sido realizadas compras por más de $25.000 en diferentes comercios, de Sunchales.

Tras las distintas investigaciones y datos recopilados, se realizó una requisa domiciliaria en la vivienda de la misma zona. El procedimiento arrojó resultado positivo, hallándose una de las camperas sustraídas. En el lugar un masculino fue sorprendido mientras intentaba huir por el techo, y fue aprehendido en el acto.

La persona arrestada, fue trasladada a la dependencia policial local. Luego de todos los trámites, el fiscal en turno dispuso que el imputado quedara en carácter de detenido comunicado, y fue trasladado a la Alcaidía local de la Unidad Regional V.

Por Móvil Quique

El hecho fue alertado cerca de las 11:00 horas, cuando la Guardia Urbana de Sunchales dio aviso a la policía sobre una posible intrusión en el domicilio ubicado de calle Río Negro al 600 apróximado. Al arribar al lugar, los efectivos constataron que la puerta de madera había sido violentada y que personas desconocidas habían ingresado con fines delictivos.

La propietaria de la vivienda, de 58 años, relató que se había ausentado entre las 8:30 y las 10:30 de la mañana. Al regresar, encontró la vivienda revuelta y notó la falta de un televisor marca LG de 43 pulgadas, de color negro, que se encontraba colgado en la pared, con parte del soporte aún atornillado.

Se iniciaron actuaciones investigativas a fin de identificar a los responsables del hecho y recuperar el elemento sustraído.

Por Móvil Quique